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“¿Por qué te abates, oh alma mía, Y te turbas dentro de mí? Espera en Dios; porque aún he de alabarle, Salvación mía y Dios mío”. Salmos 42: 5

Es difícil aceptarlo pero lastimosamente es cierto que los noviazgos cristianos muchas veces no tienen nada de diferente a un noviazgo mundano, ¿Por qué?, pues porque esta siguiendo el mismo modelo que el mundo enseña sobre el noviazgo, olvidándose que el que está en Cristo nueva criatura es, las cosas viejas pasaron y he aquí todas son hechas nuevas.

Le podemos llamar noviazgo de Emoción a aquellos que son dejados llevar por el emocionalismo del momento, olvidándose de consultar y esperar una respuesta de Dios.

¿Sabias que entre consultar y esperar hay una gran diferencia?, ¡Claro que la hay!, aunque no te guste aceptarlo.

Para conocer un ejemplo de noviazgo de emoción lo describiremos a continuación, recuerda que toda coincidencia es pura providencia:

El chico o la chica llegan a la Iglesia y de repente vieron a alguien que les simpatizo, en momento determinado chocaron y tuvieron una platica, se dieron cuenta que tenían cosas en común y se comenzaron a ver con ojos brillosos, se piden el nuevo de teléfono y se llaman una que otra vez, se envían mensajes de texto a su celular como buenos amigos y uno que otro e-mail sin faltar la típica postal. Luego de una semana se dieron cuenta que son tal para cual y deciden comenzar a orar para saber si Dios quiere que estén juntos, después de dos días se dan cuenta que si, Dios quiere que estén juntos y después de 9 días de haberse conocido o de haberse enamorado, comienzan un noviazgo el cual en ningún momento “Dios autorizó”.

Lastimosamente el 99.99 % de esta clase de noviazgos terminan en un desastre completo, corazones dañados, jóvenes que ya no creen en el amor y lo peor de todo muchos se alejan de Dios y de la iglesia, como que si Dios tuviera la culpa de su emocionalismo.

Ahora que ya sabes a lo que nos referimos al mencionar un noviazgo de emoción, queremos decirte que entre consultar a Dios y esperar una respuesta hay mucha diferencia, no solo en concepto, sino en TIEMPO.

La mayoría de jóvenes, quizá consultan a Dios antes de entablar un noviazgo, le dicen: “Dios dime si ella o el es para mi”, OK ya hiciste la primera parte, aunque si tu oración es tan corta como la que escribimos creemos que tardara mas en responder, puesto que si no tienes un habito de búsqueda de Dios, difícilmente serás audible a su voz, pero digamos que ya oraste, OK hasta ahí estábamos bien, ahora viene la parte mas difícil y es la de ESPERAR.

La palabra ESPERAR no es muy popular entre el pueblo de Dios, mucho menos entre los jóvenes, todos queremos las cosas instantáneamente, como por arte de magia, como que si Dios no tiene a quien mas contestarle solo a nosotros y es por eso que necesitamos ya o ya la respuesta.

La mayoría de noviazgos que fracasan es porque no pudieron superar la etapa de ESPERAR, sino que se dejaron llevar por su emoción y comenzaron su noviazgo, creyendo que con solo consultar su respuesta era un SI. Lastimosamente se olvidaron que después de consultar, viene una respuesta, que como puede tardar un día, puede tardar un mes o un año, no lo sabemos, Dios tiene un trato diferente con cada uno de nosotros.

Es por esa razón que los Jóvenes de BETEL te invitamos a entender que cuando consultas a Dios, tienes que esperar una respuesta de El y mientras no la tengas, no des ningún paso adelante, puesto que si lo haces, todo lo que hagas fracasara.

No te adelantes por un emocionalismo, si realmente anhelas que esa persona sea la indicada para ti, espera en Dios una respuesta, puesto que si es para ti, nadie absolutamente nadie te la puede quitar. Dios ya tiene trazado un plan perfecto para tu vida, pero depende de ti si permites que ese plan se cumpla o lo quieras cambiar por una emoción que te durara poco y dejara mal tu corazón.

Te invitamos a que no caigas en el error del noviazgo de emoción, sino que tu noviazgo sea un noviazgo que anhela hacer la voluntad de Dios desde el inicio y ¿Como demostrarlo?, pues la mejor manera es: Esperando una respuesta de Dios.

Dios quiere bendecirte, pero el tiene un tiempo especifico para todo, no te adelantes a ese tiempo por una simple emoción pasajera, pues los resultados de tu emoción te pueden costar la unción.

Un mensaje de: Jóvenes de BETEL

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